Roger Milla había triunfado en el mundial de Estados Unidos y Amelie, una niña de Duane, quería seguir sus pasos pero se encontró con un gran problema: era mujer y esto no estaba bien visto en Camerún. Llego a jugar la Copa de África el año 2000 (cobro 200 Euros).
Al cumplir los 22 años decidió venir a España a cumplir su sueño – Jugar en Europa. El camino no fue fácil pues tuvo que cruzar África .
Salió por el norte, de ahí a Nigeria y Niger. En la frontera de Libia estuvo cuatro días. “No dejaban pasar a mujeres solas”. Habló con un chico que también huía, fingieron ser pareja. Al llegar a Libia trabajó cuatro meses dando clases de francés antes de saltar al país siguiente. “Me fui a Argelia”. Dos años después de haber comenzado su viaje, cruzaba la frontera escondida en el maletero de un coche. Así llegó a España. Pasó un mes en Melilla y de ahí a Algeciras. Cuarenta días en otro campo de inmigrantes.
Por fin estaba en España, iba a realizar su sueño. “Comencé a entrenarme con el Rayo, pero no podía jugar. Decían «que era buena, que tenía nivel, pero no pasaporte”. Su hermana, a pesar de no estar de acuerdo con que Amelie jugase al futbol, tuvo que ceder, así que le hizo llegar el pasaporte desde Camerún. Debuto con el Adepo Palomeras. Fueron seis años, cuatro sin papeles. Trabajaba de mensajera para sobrevivir. Pero jugaba, “Me siento afortunada: el fútbol me ha ayudado en todo en la vida”
Cuando conocí a Amelie había dejado el fútbol pero seguía amando este deporte, tenía tanta ilusión que decidió continuar en este “mundillo” que era ya su vida.. Se hizo representante de jugadores para intentar dar oportunidades a esos chicos que trae desde África, inculcándoles sus experiencias, y obligándoles a que estudien y aprovechen sus oportunidades, valores que recibió de su madre y de su hermana.
Ha conseguido que alguno de sus chicos llegue a primera división, se ha abierto camino en el mundo de la representación. Ahora es reconocida en su país no solo por su labor como Agente de Futbol, sino también por la organización de campus.
Suerte amiga te lo mereces.